Saludo a todos los católicos de la Arquidiócesis de Tijuana y a todas las personas de buena voluntad de Baja California.
Nos encontramos en la Semana Santa y en estos días celebramos los misterios centrales de nuestra fe: a Cristo que padece, muere y resucita por nuestra salvación.
Los invito a vivir con un espíritu de recogimiento estos días santos.
El Jueves Santo celebramos la institución de la Eucaristía. Cristo se quedó con nosotros en la apariencia del pan y del vino. Celebramos la institución del sacerdocio. Cristo compartió su sacerdocio con su Iglesia, y celebramos el nuevo mandamiento del Amor. Nos enseñó: “ámense unos a otros como yo los he amado.”
El Viernes Santo celebramos la muerte de Cristo, que sube al madero y entrega su vida por todos nosotros. El inocente murió por los culpables, el que no conoció pecado cargó sobre si nuestros crímenes para redimirnos.
Y el Sábado por la noche, domingo temprano celebraremos la resurrección de nuestro Señor Jesucristo. Cristo no quedó muerto. Estuvo unas horas clavado en la cruz y lleva 20 siglos vivo y resucitado en medio de nosotros.
Lo podemos reconocer en sus tres presencias reales:
1.- En la Sagrada Escritura, su palabra.
2.- En la Eucaristía.
3.- Y en cada uno de nuestros hermanos que nos rodean.
Los exhorto a unirnos a Jesús clavado en la cruz, y a unir nuestro sufrimiento, nuestras enfermedades, nuestros trabajos, nuestras dolencias a este Cristo Salvador para que todo este sufrimiento tenga un valor salvífico y redentor para nosotros y para los que nos rodean.
Los invito a morir con Cristo a nuestros egoísmos, a nuestros pecados para resucitar con Él al amor, a la gracia, a una vida nueva.
Disfruten estos días santos. Disfruten de la alegría de Cristo Resucitado que se prolongará a lo largo de 50 días hasta que celebremos Pentecostés, la venida del Espíritu Santo sobre su Iglesia.
Muchas felicidades a todos y disfrutemos de la Pascua del Señor, del triunfo de Cristo sobre el pecado y la muerte.
Dios les bendiga.
+Mons. Francisco Moreno Barrón
Arzobispo de Tijuana