Aunque la delegación Baja California de la Federación de Colegios de Valuadores, (Fecoval) fue uno de los principales impulsores de la Ley Estatal de Valuación, sus agremiados fueron eliminados del Consejo Estatal en 2016, según informó el Arq. Leonardo Topete Sánchez, presidente del organismo.
En el marco de su segunda sesión de trabajo, en la que se discutió acerca de la problemática del sector para ejercer la valuación en virtud de la norma en la materia, Topete Sánchez recordó que esta ley fue publicada en el 2011 y posteriormente fue modificada por decreto en el 2016, modificando 24 de los 45 artículos, cuando los colegios de valuadores tenían asiento, voz y voto en el Consejo Estatal de Valuación.
“En ese año quienes tienen lugar en el consejo estatal de valuación son únicamente representantes de los municipios, es decir, funcionarios públicos que no necesariamente tienen la especialización o el conocimiento al respecto; en esta ocasión hay un solo miembro que es el representante del municipio de Tijuana, de ahí en fuera nadie más, van los recaudadores de rentas o va el tesorero”, aseveró.
Lamentó que debido a que no hay cuerpos colegiados que rijan la actividad y a que no hay una persona que pueda hablar sobre el bien hacer o las afectaciones que puede haber por una mala valuación, no hay manera de darle certeza a la población de que los trabajos que se están realizando a nivel comercial son con apego a ética.
Puntualizó que las atribuciones del Consejo de Valuación en la entidad deben radicar en la actividad privada del sector, mientras que las de la Comisión Estatal recaerían en lo público, pero desde octubre del año anterior esto cambió una vez que otorgaron la facultad de realizar los registros como peritos valuadores a la Comisión.
“El cuerpo de la Comisión está hecho para regir sobre la valuación de los bienes inmuebles en la entidad y de los municipios, es decir las propiedades públicas; como cuando va a haber una enajenación, para ese tipo de circunstancias son sus facultades, mientras que el consejo estatal rige sobre todo lo privado, Nada tiene que ver la comisión rigiendo sobre la aplicación en casos privados”, abundó Topete Sánchez.
Igualmente señaló que a pesar de que en el 2011 los valuadores tenían registro en el Consejo, ya no se les toma en cuenta en las convocatorias que son hechas de manera privada, puesto que sólo le avisan a ciertos valuadores vía correo electrónico, indicándoles que tenían que estar registrados en la Comisión.
Además de eso, manifestó que de manera arbitraria la valuación de bienes inmuebles, terrenos y construcciones fue asignada exclusivamente a ingenieros civiles o arquitectos, determinándolos como carreras afines a dicha actividad, tomándose atribuciones que no les competen, limitan la capacidad para ejercer la profesión valuatoria, sin importar la experiencia, especialidades, etc., de los profesionistas con carreras distintas a las anteriores escritas.
“Quienes modificaron esta ley se tomaron la atribución de decir cuáles eran las carreras afines o no, de tal manera que un ingeniero industrial que tiene 25 años de experiencia en el ramo, no está avalado para valuar una casa para Infonavit, nada más porque no se les quiso reconocer”, expresó el especialista.
Para concluir, enfatizó que Tijuana será sede del Primer Congreso Mundial de Valuación del 8 al 13 octubre en el Hotel Real Inn, tras haber ganado México la designación ante la Unión Panamericana de Asociaciones de Valuadores (UPAV), de la cual forma parte la Federación Mexicana de Colegios de Valuadores (FECOVAL) y del Pan Pacific, que abarca los principales países de la cuenca del pacífico, desde Canadá hasta Nueva Zelanda y Australia, además de participaciones de profesionistas provenientes del continente europeo, Rusia, India y Sudáfrica.
